Sorgo Rojo

19:30


El maestro le tiró a lo grande desde el principio, con un film redondo que iniciaba una de las filmografías más consistentes, personales y brillantes del último cuarto del siglo pasado. Y es que si ya hay algo que despunta en su primera película es su extraordinario sentido para lo visual, para lo simbólico y para el retrato de mujeres, tres aspectos que serán comunes en su obra posterior. Ya se percibe en Yimou un casi obsesivo gusto por los pequeños detalles, que empiezan pareciendo meros caprichos del director para terminar convirtiéndose en elementos imprescindibles en la narración (el campo de sorgo, los tazones, el vino, la puerta de la colina…), haciendo que el relato adquiera una estructura circular. Lo mismo ocurre con su tratamiento del color, en el que demuestra una sensibilidad especial para utilizarlo como elemento dramático de entidad en la narración, en este caso el rojo, omnipresente en el metraje desde las mismas letras del título del film o en las terrosas tonalidades del paisaje, el color del vino de sorgo o de la sangre. Los encuadres están cargados de belleza, tanto en los planos generales como en planos más cortos, que se benefician de un enorme trabajo de fotografía. Una de las cosas más fascinantes de este primer periodo de Yimou es la sutileza con la que trata el aspecto socio-político, provocada por la rígida censura china, proponiendo cierto juego de interpretación sumamente estimulante. Pero incluso desde el lado estrictamente dramático muestra unos personajes sólidos, a veces contradictorios pero enormemente reales y creíbles. En especial el personaje principal, magníficamente interpretado por una debutante Gong Li, es indudablemente parte del personal universo femenino de Yimou. Sorgo Rojo se mantiene a día de hoy como uno de los debuts más brillantes y fulminantes del cine en el siglo XX, abriendo el camino a una obra diferente, personalísima y de gran belleza visual, casi siempre y en sus mejores casos, coronado por la belleza y el talento de su mítica musa.

De que trata?
Muy sencillo.
Basada en la celebre novela de Yan Mo, Una joven es vendida por su padre al rico y asqueroso cacique del pueblo, de camino a su nueva vida, se enamora de un apuesto y lleno de vida peón, responsable de su buen arrivo a lo que será su nueva hogar.




1 comentarios:

vaLar dijo...

Interesante; es grato ver que Yimou tiene la buena costumbre de cargar la escena de color y simbolismos.